¡Cuánto tiempo sin pasar por aquí! Cuando empecé el blog pensé que tendría mucho más tiempo pero entre una cosa y otra al final nunca encuentro el momento. Pero lo bueno es que ya está casi todo listo! Menos mal porque empieza la recta de las dos cifras, es decir, quedan... ¡99 días! (eso es igual a NADA). Por eso, en estas últimas semanas he aprovechado para centrarme en ir cerrando todo lo que tenía a medias porque sino siempre tengo la sensación que tengo mil frentes abiertos.
Os cuento mejor por pasos porque se me acumula información jeje:
1. ¡Ya tenemos elegido el menú! Costó bastante elegir porque todo estaba buenísimo pero con la ayuda de nuestros padres ya lo tenemos! Está claro que siempre habrá gente a la que no le guste pero en estas cosas es imposible contentar a todo el mundo, pero creemos que gustará bastante a la mayoría. Eso sí! El entrante es un poco arriesgado pero vale la pena por lo increíblemente bueno que está.
2. Mis queridas damas ya tienen su vestido. Después de vueltas y vueltas, y muchos dolores de cabeza por no encontrar un vestido que les sentara bien a las tres, encontramos una tienda donde cada una pudo elegir el estilo que mejor le sentaba hechos con la misma tela y mismo color. Así que segurísimo que estarán espectaculares cada una dentro de su estilo, porque lo importante es que se sientan cómodas y a gusto con lo que llevan. Ahora sólo faltan los zapatos, pero eso ya es cosa suya, yo me desentiendo jeje. Para las que pasáis por la misma situación y no encontráis vestidos para vuestras damas os recomiendo ir a Xantú, os atenderán genial y seguro que salís con lo que buscáis.
(y también si buscáis trajes de invitadas, madrinas y demás eh?)
3. Las invitaciones están a punto de salir del horno. Si todo va bien la semana que viene podremos empezar a repartir. Se que estaréis pensando en que nos hemos retrasado un poco, y tenéis toda la razón pero nuestras invitaciones están creadas desde cero, por nosotros, desde el primer detalle hasta el último (bueno, y con la ayuda del diseñador Lluís Llinás que sin el no hubiera sido posible plasmar todas nuestras ideas). Siempre tuve claro que para el día de mi boda quería algo muy nuestro, nada de copiar ideas ajenas o de coger las típicas invitaciones prediseñadas que todo el mundo utiliza, pero claro, eso requiere más tiempo y esfuerzo. Pero el resultado estoy segura de que valdrá mucho la pena. A ver si más adelante os puedo enseñar algo...
4. Mis zapatos de novia. Era algo que me preocupaba bastante porque no encontraba ningún zapato de novia que dijera, uy que zapato más bonito...más bien me eran muy indiferentes hasta que un día pasé por un escaparate y allí los ví y supe que no podían ser otros que esos de Membur. Entré con la intención de llevármelos a casa pero no tuve suerte, porque no estaban en mi talla. Menos mal que pude recurrir a pedirlo online. Todo bien hasta el momento, encontré mi talla y realicé el pedido que me aseguraba que en 3 días los tendría en casa. Y como estaba liada pasó el tiempo y a los 15 días me dí cuenta de que mi pedido no había llegado aún. Me puse en contacto con Membur y me dijeron que mi pedido había sido entregado sin ninguna incidencia y que me pasarían el justificante de entrega. Imaginaros mi cara de póquer...¿hola, qué tal, dónde están mis zapatos?. Me pasan el justificante en el que figura una firma que bien podría ser la del vecino o la de la del bar de la esquina pero sin dni, sin nombre y sin nada. Me pongo en contacto de nuevo con la empresa y me dicen que lo debe haber cogido algún familiar mio...¿Holaaaa? Pero si no vivo con mis padres. Me dicen que no me pueden devolver el dinero ni proceder de nuevo al envío porque no hay incidencias. ¿No les parece bastante incidencia entregar un paquete a otra persona, sin pedir identificación? Mal, mal, mal...para ser una empresa así ofrecen un servicio nefasto. Me dicen básicamente que me busque la vida y que hable con el mensajero. Lo hago en varias ocasiones, pero en la última, misteriosamente me dicen que hubo un error y que tienen allí el paquete. Me justifican que lo entregaron en otra dirección y que supuestamente alguien con mi mismo apellido recogió el paquete pero que al cabo de unos días lo devolvió. Un poco raro no? Otra dirección, mismo apellido, sin saber donde y a quien se entrega el paquete, cuando ven que hay problemas el paquete aparece misteriosamente y sólo averiguo que el paquete está allí porque yo llamo. Un poco raro, dado que la persona encargada de la comunicación de Membur me dijo que había llamado ese mismo día a la empresa de transportes y que el paquete como me había repetido 80 veces estaba entregado sin incidencias y que no me quedaba otra que aguantarme. Si os parece normal que una marca de ese prestigio actúe de esa manera decírmelo, porque a mi me parece vergonzoso. Así que os recomiendo que no pidáis nada en su web, si encontráis lo que buscáis en tienda física genial, pero si tenéis que pedirlo id con mucho ojo porque puede que os pase lo que a mi y que el paquete no aparezca y que nadie se responsabilice de nada cuando la empresa tiene toda la culpa y tu no tienes nada que ver en el asunto. Los zapatos muy bonitos pero el trabajo de los trabajadores de la marca un CERO PATATERO.
5. Sesión de fotos y video de preboda lista. Muchos de vosotros ya habéis visto algunas de las fotos que hicimos para nuestra preboda. Como escenario escogimos la feria, porque nos apetecía un ambiente desenfadado, sencillo, divertido y con mucho color. El resultado no pudo ser mejor, todo gracias a Víctor Chito de Vis&Company que nos hizo sentir cómodos desde el minuto uno. Ya hemos visto las fotos pero ahora nos queda por ver el video pero no lo haremos hasta que pase la boda pues será la introducción al video del gran día. ¡Qué ganas de ver el resultado! Os dejo con un adelanto con una de mis fotos favoritas de la sesión.
En cuanto pueda estoy aquí de nuevo con más novedades. Un abrazo enorme a todos los que pasáis por aquí.
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