¡Tengo vestido!

Hola a todos de nuevooo! Siento no haber actualizado antes pero he tenido problemas con el wifi de casa y me ha sido imposible. Pero tengo cositas nuevas guardadas para contar, porque cada semana pasa algo, pequeño o grande, pero siempre algo. El sábado, para no perder la costumbre, quedé para volver a ver vestidos, pero esta vez con mis amigas (y a la vez damas de honor) Noe y Natalia. Después de la semana pasada empecé a dar vueltas y vueltas a mi cabeza con el tema de los vestidos porque tenía dos en mente: el del primer día de Pronovias y el del segundo día de Aire Barcelona. Por eso, las necesitaba a ellas, para que me dieran su opinión y me ayudaran a decantarme por uno o por el otro porque los dos me encantaban.

VS

Quedamos a las 9.30 de la mañana en el Lizarran de la Plaza Mayor (qué raro se nos hizo ver la plaza a esas horas de la mañana), desayunamos algo y nos plantamos en Pronovias. Me hizo ilusión saber que ellas nunca habían estado en una tienda viendo a nadie probarse vestidos de novia. Ser la primera vez de alguien es guay, jeje. Y ahi estábamos, esperando a Cristina que apareció enseguida en lo alto de las escaleras. Subimos directamente al piso de arriba, a la habitación de los sofás con espejos de la otra vez y le pedí a la chica que disimulara conmigo para que mis amigas no supieran cual era el vestido que me gustaba y así no estuvieran condicionadas a la hora de darme su opinión. 

Así que, empezamos a despistarlas probándome vestidos que nada tenían que ver con "el vestido". Sus caras eran un poema, jajaja estaban súper desconcertadas pero a la vez súper contentas de verme vestida de novia. Uno detrás de otro, cada vez estaban más liadas porque un modelo no tenía nada que ver con otro. Hasta que me probé uno que descubrí ese mismo día y sus caras cambiaron, noté que les había encantado, incluso ya empezaba a caer alguna que otra lagrimilla. Pero, todo cambió cuando me probé "el vestido". Creo que mi cara también era diferente y la atmósfera en sí también había cambiado, y supieron enseguida que era "ÉL". Sus caras sólo con mirarlas me dijeron que era perfecto. Natalia empezó a llorar diciéndome que estaba súper guapa, y Noe más dura, jeje pero también me hizo sentir que tenía que ser ese vestido. Fue un momento muy bonito, de esos en los que no hace falta hablar porque todo queda dicho con las miradas y los gestos. Al final terminé llorando hasta yo, y lo tuve claro del todo. Había encontrado: EL VESTIDO. Cristina me probó todos los complementos y todo era perfecto. ¡Qué felicidad! Ya no había dudas y sentí que ya no necesitaba ir a la otra tienda porque ya lo tenía más claro que nunca y no quería ver nada más que no fuera mi vestido.

Ojalá pudiera dar más detalles pero tendréis que esperar al gran día para saberlo todo!! Imagino que habrá opiniones de todo tipo, porque es un vestido que no deja indiferente a nadie, pero lo que tengo claro y lo que me importa es que para mi es el mejor de todos y el que me hace sentir más guapa, que es lo más importante. Ahora el siguiente paso con mi vestido serán las pruebas! Que ganas :) Ya os iré contando. Pero ahora a corto plazo, hay una cosa que tenemos que solucionar pronto...el vestido de las damas de honor, que será un pieza muy clave también en nuestro día.  Creo que va a ser más complicado de lo que pensábamos porque cada una tiene un cuerpo y un estilo diferente, pero al final estoy segura de que encontraremos el vestido perfecto y estarán las tres preciosas.

Para las que aún no habéis escogido vuestro vestido, aquí os dejo algunos trucos para escoger el mejor según nuestro cuerpo para encontrar el que más nos favorezca para estar increíbles en nuestro gran día. Yo por ejemplo, empecé con una idea y terminé con otra totalmente diferente. Por eso, la clave está en probar todo tipo de modelos que nos gusten sin tener un tipo concreto para poder ver lo que nos sienta mejor (que no siempre será lo que tengamos en mente inicialmente).Espero que os sirva de ayuda! :)